Cómo hacer un plan de empresa

CONCEPTO DE NEGOCIO

Idea de negocio, o concepto de negocio. Un concepto de negocio es básicamente cómo describes la cafetería de tus sueños a tu entorno. "Habrá una mesa con un tocadiscos y discos para pedir prestados, de las paredes colgarán cuadros de artistas locales y el café se pagará con una sonrisa". Básicamente, es un concepto que puede utilizar después para sus fines comerciales. Sin embargo, difícilmente resume todo lo que necesitas para tu negocio y, desde luego, no te garantiza que tu negocio vaya a ser rentable. Para eso necesitas un buen plan de empresa.

UN PLAN DE EMPRESA

Un modelo de negocio, o plan de empresa, a diferencia de un concepto de negocio, define claramente cómo y con qué vas a ganar dinero. Te dice si tu proyecto es viable y pone de relieve posibles escollos en el futuro, incluso antes de que el negocio haya empezado.

Un plan de empresa bien diseñado puede ayudarle en diversas situaciones. Sin embargo, le será especialmente útil si, como empresa, solicita financiación a un banco o inversor o busca un socio.

Su plan de empresa también puede ser una buena herramienta de motivación para sus empleados. Con su ayuda, podrá comunicar más fácilmente a sus empleados sus planes y su visión de la empresa.

Cómo elaborar un plan de empresa

Si conoce su visión y sus objetivos, ya ha recorrido la mitad del camino. Tu plan de empresa debe estar siempre por escrito, aunque sólo vayas a utilizarlo para tus fines personales. La razón es que, cuando lo redactes, serás consciente de los pasos que tienes por delante y de cuánto te costará poner en práctica tus planes. Cuando elabore su plan, también es importante que piense en los riesgos potenciales a los que puede enfrentarse. En este punto ya debe saber cómo va a afrontar los posibles riesgos.

Su plan de empresa debe responder siempre a las siguientes preguntas:

  • ¿A quién vendo? ¿Para quién voy a crear valor? ¿Quiénes son los clientes más importantes?
  • ¿Qué voy a vender? ¿Cuál es mi propuesta de valor? ¿Qué necesidades satisfago?
  • ¿A cuánto estoy vendiendo? ¿Cuál es mi precio y mi flujo de ingresos? ¿Qué pagan los clientes?
  • ¿Cómo vendo?
    • ¿Cuáles son mis canales de distribución y venta?
    • ¿Cómo trabajo con mis socios comerciales?
    • ¿Quiénes son mis proveedores clave?
  • ¿Cuál es el margen? ¿Es demasiado grande o demasiado pequeño?
  • ¿Cuál es el flujo de ingresos? ¿Cómo se distribuyen en el tiempo?
  • ¿Qué se ofrece gratis y qué se cobra?
  • ¿Qué necesito vender (infraestructura, entrega, proveedores)?
  • Plan de ingresos y costes.
  • ¿Qué se puede ofrecer al cliente?
  • ¿Abordamos una necesidad urgente u ofrecemos excedentes?
  • ¿Cuál es la estructura de costes? ¿Cuáles son los costes más importantes? ¿Qué recursos y actividades clave son los más caros?

Asegúrate de que tu plan de empresa es claro, lógico, conciso, veraz y realista, y respeta los riesgos potenciales.

Recuerda que un plan de empresa es un "documento vivo" que te ayudará a comprobar continuamente cómo estás alcanzando tu visión y tus planes. Actualiza tu plan de empresa al menos una vez al año.

ANALIZA TU SECTOR Y A TUS COMPETIDORES

El primer requisito previo para un buen plan de empresa es un análisis preciso de la situación actual y futura de su negocio. Este análisis le ayudará a evaluar su base de clientes potenciales y a estimar la viabilidad económica de su plan de empresa. También le ayudará a encontrar su lugar en el mercado. Es un requisito previo para evaluar adecuadamente sus oportunidades de venta y sus necesidades financieras. Diversos análisis, como el análisis de las cinco fuerzas de Porter, el análisis DAFO o el análisis PEST, pueden ayudarle.

En concreto, debe centrarse en las siguientes preguntas:

  • ¿Quiénes son mis principales competidores?
  • ¿Cuál es su estrategia?
  • ¿Cuáles son sus objetivos?
  • ¿Cuáles son sus puntos fuertes y débiles?

Análisis de las cinco fuerzas de Porter

El análisis de las cinco fuerzas de Porter es una forma de analizar el sector en el que quiere hacer negocios y todos sus riesgos. Básicamente, este análisis te permite predecir la evolución de la situación competitiva. Para ello, analiza cinco influencias clave que afectan directa o indirectamente a la competitividad de una empresa:

  • competidores existentes
  • competidores potenciales
  • proveedores
  • compradores
  • sustitutos

Análisis DAFO

Es la herramienta de análisis más común. Es un marco analítico general y un procedimiento que localiza y evalúa la importancia de los factores en términos de puntos fuertes y débiles, así como de oportunidades y amenazas.

Le recomendamos que empiece analizando las oportunidades y amenazas que provienen del entorno externo de la empresa, tanto del macroentorno (que incluye factores políticos, jurídicos, económicos y tecnológicos) como del microentorno (es decir, sus clientes, proveedores, compradores, competidores y el público). Las amenazas y las oportunidades son influencias externas sobre las que no podemos influir nosotros solos, sólo el comportamiento posterior de la empresa.

A un análisis exhaustivo del entorno externo le sigue un análisis de los puntos fuertes y débiles, que abarca el entorno interno de su empresa (objetivos, recursos corporativos, cultura corporativa, relaciones interpersonales, estructura organizativa). Los puntos fuertes y débiles son esencialmente factores internos que podemos controlar parcialmente e influir posteriormente nosotros mismos.

RESUMEN Y RECOMENDACIONES

Piense en cómo va a ganar dinero su empresa. Si en tus comienzos te centras en el atractivo de tu cafetería en lugar de en lo que te hará ganar dinero, tu negocio no durará mucho.

Intenta centrarte en cosas que puedas medir de forma tangible, como los costes, los proveedores, los ingresos previstos y las actividades principales. Esto te ayudará a construir una visión realista de tu negocio que te ayudará a sentar unas bases sólidas sobre las que seguir construyendo.

Recuerda que el éxito de abrir una cafetería depende en gran medida de las decisiones que tomes antes de abrir.